¿En qué consiste este fenómeno?, ¿a qué se debe?, ¿podemos prevenirlo o tratarlo? En el post de hoy encontraremos las respuestas a estas preguntas sobre este curioso diagnóstico.

En primer lugar, debemos tener claro cuándo hablamos de hipertensión. Como sabemos o imaginamos, este concepto hace referencia a niveles elevados de nuestra presión arterial. Es considerado un factor de riesgo para nuestra salud porque multiplica por dos la probabilidad de sufrir problemas cardiovasculares, cerebrovasculares, hemorragias… En muchos casos, las causas de la hipertensión son desconocidas pero si bien es cierto que existen condiciones o comportamientos que nos predisponen a padecerla: sedentarismo, sobrepeso, alto consumo de sal, consumo de alcohol y/o tabaco, estrés prolongado, etc.

¿Y cuando hablamos de la Hipertensión de Bata Blanca (HBB)?

Hablamos de HBB cuando se produce una elevación de la presión arterial provocada por la presencia del personal sanitario y/o del médico durante el proceso de medida, lo que reduce notablemente la validez del diagnóstico de hipertensión esencial. Este hecho fue descrito por primera vez por un médico italiano que comprobó, como es de esperar, que el aumento de la tensión correlacionaba con un aumento de la frecuencia cardíaca.

Se ha observado que, en conjunto, entre un 20 y un 35% de los pacientes hipertensos sufren HBB.

¿A qué se debe su aparición?

Las causas que se han asentado como predecesoras de este fenómeno varían de unos pacientes a otros, pero en su mayoría están relacionadas generalmente con: el miedo e inseguridad producidos por la probabilidad de tener unos valores altos de presión arterial (anticipación negativa), las diferencias de estatus médico-paciente que algunos de estos últimos perciben en consulta, características de personalidad ansiosa… Lo cierto es que ninguna de estas “causas” han podido ser confirmadas como la única o verdaderamente responsable de la aparición de la HBB. Lo que está claro es que la mayor consecuencia es un incremento de la presión arterial que suele ser resistente al tratamiento farmacológico.

¿Podemos prevenirlo o tratarlo?

Las dos únicas formas que, de momento, han arrojado resultados positivos para reducir los niveles de presión arterial en pacientes con HBB son:

  1. Hacer un estudio médico más preciso para conocer cuál es la frecuencia cardiaca y la presión arterial del paciente mientras desarrolla sus actividades normales durante 24 horas. Esto se conoce como Holter y MAPA (Monitorización Ambulatoria de la Presión Arterial). A la luz de estos resultados podremos conocer si la presión arterial elevada se debe a una hipertensión esencial o a una hipertensión de bata blanca. De esta forma, desde la consulta médica se podría evitar la sobremedicación de un paciente cuyo diagnóstico de HBB no requeriría fármacos
  2. En caso de tratarse de HBB, se debería trabajar con la persona diagnosticada en el plano emocional, puesto que se ha detectado que cuando una persona de menos de 60 años presenta HBB se debe, principalmente, a un reflejo tensional emocional.

 

 

Silvia Muñoz Morales

Máster en Psicología General Sanitaria

Twitter: @justpsyblog

Facebook: /justpsyblog

Psicóloga de We Doctor

Solicitud de consulta online con Silvia: https://tuconsulta.we-doctor.com/agenda/3276802

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